¿Victoria Generala?
La colocación de un busto de Isabel Perón en el Senado, donado por el nazi Ricardo Iorio, por parte de la vicepresidenta Victoria Villarruel y la reivindicación de la figura de la expresidenta, ha generado diversas interpretaciones. En 2016, Villarruel, entonces dedicada a defender a los militares presos por crímenes de lesa humanidad, criticaba a Isabel Perón. Ocho años después, la visitó en Madrid antes de ver al papa Francisco, se tomó varias fotos con la viuda de Perón y chicaneó a los peronistas que no reivindican a Isabel Perón.
Los observadores interpretan esta maniobra de la Vicepresidenta como un posicionamiento político, una forma de ampliar su base de apoyo social. Es decir, estaría buscando una plataforma más amplia en el segmento popular que vota al peronismo. También podría estar posicionándose ante una eventual crisis del presidente Milei, quien enfrenta conflictos importantes como el de las universidades, lo que sugiere una profundización de la conflictividad en otros sectores afectados por el ajuste aplicado desde el 10 de diciembre de 2023.
Por eso, Victoria Villarruel comienza a escalar posiciones con autonomía, sin seguir la agenda del jefe libertario, para acceder a un ascenso rápido, de capitana a generala.